La muerte de la reina Isabel II supone 10 días de lutos en el Reino Unido y un protocolo de varios eventos. La última ceremonia en honor a la monarca más longeva en la historia de la realeza británica se llevó a cabo hace unas horas y se trató de llevar su cuerpo en procesión desde el Salón del Trono en el Palacio de Holyroodhouse en Escocia a la catedral de St. Giles. Para la ocasión, la ahora reina consorte, Camila le rindió tributo a la difunta a través un impresionante accesorio.
Mientras que los cuatro hijos de la reina Isabel, el rey Carlos III, la princesa Ana, el príncipe Andrés y el príncipe Eduardo caminaron justo detrás del cuerpo, Camila siguió la procesión en carro junto a Sofia de Wessex, la esposa del príncipe Eduardo y optó por un look bastante acertado.