Kim Kardashian protagoniza la portada más reciente de Allure en donde promociona su línea de skincare llamada
y además, habla sobre los a los que se ha sometido. La estrella de reality show contó lo que ha hecho exactamente para mantener su rostro de 41 años lo más libre de arrugas posible, y a diferencia de lo que piensas, no consiste en .
La creadora de Skims reveló que actualmente tiene un “poquito” de
en el ceño y aclaró que no usa fillers, y que nunca los ha usado. Señaló que sus mejillas y labios no tienen rellenos. “Sin relleno. Nunca llené ninguno de los dos, nunca”, agregó.También negó tener extensiones de pestañas y confirmó que sus cejas son reales. “Nunca he tenido extensiones de pestañas”, dijo. “Nunca he hecho nada. Hoy tengo un poco de rímel. Nunca me he llenado las mejillas. Nunca me he llenado los labios”, recalcó.
Lo que sí admitió es que se somete a tratamientos láser regularmente y agregó algo que a todos nos ha quedado claro a lo largo de los años: "Me importa. Realmente me importa genuinamente lucir bien”.
Explicó que debido a su agenda tan ajetreada y a que tiene que hacerse cargo de sus cuatro hijos, por las noches, ya que todos están acostados, aplica su rutina de skincare y también se hace tratamientos con láser. Aceptó que sabe que no es perfecta pero aseguró que se siente bien así, aunque antes le costaba un poco más de trabajo aceptarse.
“Odio mis manos, están arrugadas y asquerosas. Pero he vivido la vida y he cambiado tantos pañales con estas manos y he acurrucado a mis bebés con estas manos, así que estoy bien con ellas. Envejecer no significa que no me esforzaré por alcanzar la perfección, pero llegas a un punto en el que dices: 'Está bien, mi salud es más importante que cualquier otra cosa'".
Finalizó su entrevista de portada diciendo que a pesar de que haría cualquier cosa por lucir y sentirse joven, sabe la diferencia entre eso y un nivel poco saludable de sentir que no puede envejecer.