Tras la muerte a los 99 años del
el abril pasado, quien fue su esposo por 73 años, celebrar su histórico como la primera monarca británica que ha estado 70 años en el trono, y su hace poco más de un mes; la reina Isabel II, de 95 años, ahora enfrenta ciertos problemas de salud propios de su avanzada edad y por tantas décadas de servicio.
En los últimos meses, la movilidad de la reina Isabel se ha visto significativamente reducida, al punto que muchos medios especularon que necesitaría una silla de ruedas. Sin embargo, además de su confiable bastón o el brazo de un acompañante para apoyarse, la reina sigue como si nada; solo que ahora ya no maneja su poderosa
, sino un lujoso carrito de golf: el reinamóvil.Para solucionar sus problemas de desplazamiento, la reina Isabel II invirtió recientemente en un vehículo eléctrico de cuatro plazas que le devolvió la libertad para que pueda disfrutar de los jardines del
, donde se instaló definitivamente a principios de este año. Este lujoso carrito de golf cuesta 75 mil euros, lo que equivale a aproximadamente a 1.6 millones de pesos mexicanos.El vehículo eléctrico fue fabricado por la marca danesa Garia en colaboración con
, y supera los 60 kilómetros por hora (a la reina siempre le ha gustado la velocidad). Es considerado el de los carritos de golf, pues con una carga tiene una autonomía de hasta 80 kilómetros e incluye asientos de piel, un pequeño refrigerador, una pantalla de diez pulgadas, entre otras amenidades.La mejor parte es que, a diferencia de un carrito de golf común, la monarca podrá conducir su reinamóvil todo el año; llueve, truene o relampagueé, pues fue diseñado para proteger a sus cuatros pasajeros incluso de las peores condiciones meteorológicas con puertas y ventanas desmontables. La única diferencia de este carrito de lujo con el famoso papamóvil, es que el de la
no está blindado.