La moda está obsesionada con Basquiat. Literalmente, obsesionada...

La foto de Beyoncé y Jay-Z con un Basquiat desató todo un debate.

Beyoncé y Jay-Z posaron frente a un Basquiat para la nueva campaña de Tiffany . Por supuesto que las imágenes se hicieron virales, pero algunos comenzaron a señalar de inapropiado el hecho de que la marca usara el cuadro en su publicidad. Alexandre Aranault, CEO de LVMH, aseguró que a pesar de no tener la certeza de que se haya hecho para Tiffany, ", el color que eligió el artista no puede ser una casualidad. Debe ser un tipo de homenaje". Pero la realidad es que la moda siempre ha estado obsesionada con el pintor estadounidense.

El público argumentó que el uso de su obra para los multimillonarios no es lo que Basquiat habría querido. Sobre todo criticaron el hecho de que la pintura, Equals Pi , nunca antes había sido vista por el público, pues era parte de una colección privada, y ahora forma parte de un anuncio. “Es una locura para mí que la gente rica pueda comprar arte de artistas que han fallecido y nadie más pueda verlo, un poco asqueroso, en mi opinión, estas piezas deberían poder ser vistas por todos, eso es literalmente lo que Basquiat hubiera querido”, señaló alguien en Twitter. ¿Pero realmente es culpa de una sola marca?

La controversia y el debate alrededor de esto se hizo gigante en redes sociales. Pero lo curioso es que el uso de las pinturas, bocetos y en general la obra de Basquiat lleva décadas en la moda y en distintos productos. Recientemente Saint Laurent lanzó una colección especial que incluye una hoodie, playeras, tablas de surf, fundas para el iPhone.

Siempre se me vienen a la mente las colecciones de Uniqlo con todo tipo de playeras y sudaderas con el estampado de Basquiat. De hecho la ropa con el artista neo-expresionista es una línea permanente en la marca. Así que en respuesta a la molestia con Beyoncé, algunos señalaron que la crítica debería de ser hacia quienes manejan el estado y el patrimonio del artista originario de Brooklyn.

Camiseta de Jean-Michel Basquiat en Uniqlo.

Las imágenes creadas por Basquiat han formado parte de colecciones de marcas como Comme des Garçons, Supreme, Alice and Olivia, en las botas de Dr. Martens, en las mochilas de Herschel, en los sneakers de Reebok, en la ropa deportiva de Peloton, en el maquillaje de Urban Decay, en las fundas de Casetify, en Barbie, hasta en las cartas del UNO y en múltiples productos para el hogar, no solo en la moda.

Dr. Martens

Lo que sucede con Basquiat es algo similar a lo que pasa con la imagen y las obras de Frida Kahlo , por ejemplo. Él es uno de los artistas cuyas obras se venden en los precios más altos en el mercado del arte y por otra parte, sus imágenes están en todo tipo de productos de venta masiva. Aparentemente es una firma la que maneja la comercialización de la obra de Basquiat en productos como éstos y no es llevado de la misma forma en que se realizan la subastas de sus pinturas.

Jean-Michel Basquiat y Andy Warhol en 1984 en Nueva York

Ante quienes argumentan a nombre de Basquiat que esto no es "lo que Basquiat habría querido", alguien en Twitter escribió: ¿Ahora todo el mundo es de repente un entusiasta de Basquiat? "Él no querría esto", ¿te dijo esto a través del tablero de oujia?

Dicho esto, hay un gran debate en la moda y el arte, no solo por Basquiat, sino por la forma en que se utiliza y reproduce la obra de los artistas en todo tipo de productod, digamos Van Gogh, Kahlo, Warhol, Magritte, Mondrian, Keith Haring (también en Uniqlo), y la lista podría continuar. ¿Hacerlo popular es quitarle su valor o una forma de acercarlo a todo el mundo? Especialmente a quienes jamás podrían comprar ni la réplica de un cuadro, ¿cierto?

Beyoncé y Jay-Z para Tiffany & Co.