El domingo pasado, durante el Beach Handball EURO 2021, el equipo femenino de Noruega (por cierto, el handball no es lo mismo que voleibol porque tiene 7 jugadores por equipo en lugar de 6 y no se separan con una red) fue multado porque las jugadoras llevaron shorts en lugar de bikinis en el partido del campeonato europeo por la medalla de bronce contra España.
Después de este acto de rebelión contra el código del uniforme, la Federación Europea de Handball (EHF) dijo el lunes que había impuesto a cada jugadora una multa de 1,500 euros (unos $35,500 pesos mexicanos) por "vestimenta inadecuada", una injusticia que llegó a los oídos de la cantante estadounidense Pink , quien decidió pagar la multa del equipo noruego.