Como se ve en Luis Miguel: la serie , Michelle Salas y el entonces manager y amigo cercano de Luis Miguel, Mauricio Ambrosi, quien en la vida real es Alejandro Ambrosi tuvieron un romance que terminó por romper la amistad que existía entre El Sol y él.
En la vida real, Michelle y Alejandro mantuvieron una relación amorosa a escondidas de Luis Miguel durante una temporada y justo cuando estaban a punto de contárselo, los paparazzi los capturaron besándose.
Michelle conoció a Asensi a los 18 años y él era mayor que ella por 20 años. Su relación amistosa comenzó cuando ella se fue a vivir a Los Ángeles con su papá y Aracely Arámbula. Comenzaron a frecuentarse y pronto su amistad se convirtió en algo más.
La hija de “El Sol” encontró un gran apoyo en él ya que siempre estuvo pendiente de ella, la ayudó a entrar a la industria del modelaje y logró que entrara a UCLA a estudiar diseño gráfico.
Su relación amistosa escaló rápidamente a algo amoroso y cada que podían, se escapaban juntos de vacaciones, iban a comer, salían al cine y al teatro, así que pronto los paparazzi los capturaron teniendo muestras de amor en público. Fue entonces, cuando en 2008 el periódico El Centro reveló correos electrónicos en donde Michelle hacía evidente su sentimientos de amor hacia él; el medió también compartió fotografías de la pareja en modo romántico y obviamente llegaron a los ojos de Luis Miguel, quien por su parte ya había mandado a investigar el supuesto romance de su hija con su manager.
De acuerdo con biógrafos de “El Sol”, el cantante se sintió traicionado por Asensi y se separó de inmediato de él. Además, tomó cartas en el asunto y mandó a Michelle a estudiar un mes a Inglaterra para que se dejaran de ver, pero en cuanto regresó, volvió a salir con él.
El último capítulo de la serie “Historia de un amor” justamente cuenta la apasionada historia de amor entre Michelle y Mauricio Ambrosi con un desnudo total de Macarena Achaga.
