Han pasado más de 20 días desde la histórica entrevista que Meghan Markle y el príncipe Harry le dieron a Oprah Winfrey y las revelaciones que hicieron los Sussex siguen protagonizando titulares. Ahora, la reina Isabel está trabajando en hacer un equipo de trabajo más diverso e inclusivo.
Durante la entrevista, Meghan confesó que un miembro de la familia real tuvo varias conversaciones sobre el color de piel que tendría Archie al nacer y la duquesa de Sussex dejó claro que en general, el Palacio no la defendió del escrutinio y racismo del que fue víctima por parte de los medios.