ELLE: ¿QUÉ OPORTUNIDAD ENCONTRASTE EN LAS NIÑAS BIEN PARA CAMBIAR TU PERSPECTIVA COMO DIRECTORA?
ALEJANDRA MÁRQUEZ (AM): Intuitivamente tenía claro lo que sentía con la historia y tiene que ver con el desarrollo de las narrativas. Hay muchas maneras de filmar una película, creo que no hay historias malas que no se deban contar o que no se puedan cuestionar a través del lenguaje cinematográfico, Las Niñas Bien me hizo descubrir que puedes tener una postura política frente a un contenido y eso me destapó la mente y me hizo hacerme muchas preguntas sobre feminismo y cine feminista.
ELLE: ¿EN DÓNDE ESTÁ PLASMADO ESE FEMINISMO?
AM: En cuestionar cómo esas mujeres, por conservar su privilegio de clase, renuncian al feminismo en general. La película habla de esto y cómo cerca de las élites las mujeres siguen siendo oprimidas, ni siquiera ahí son libres. Hacer esta denuncia, tratar de retratarlo, fue mi forma de hacer un acercamiento feminista a ese material.
ELLE: ¿CÓMO EXPRESAS EN TU CINE ESO QUE TE HACE ENOJAR?
AM: Me enojan muchas cosas, pero a lo que más le doy tiempo es al feminismo. De entrada ser mujer y ser directora de cine suena muy bonito, pero es complicado. Necesitas aguantar muchas cosas e ir desbloqueando muchos niveles, no es fácil. En mi trabajo el tema de género es un embudo por el que paso todos mis proyectos. Ocupo mi tiempo de voluntariado en Ya es hora, una iniciativa que armamos con diferentes mujeres de la industria, tenemos un podcast y mi papel ahí es investigar, leer, desmenuzar y hablar con más gente sobre las narrativas y la mirada femenina; qué significa desde el guion hasta la producción y la dirección. El cine es una herramienta de propaganda poderosísima y siempre ha representado la mirada masculina, pero ahora nos toca que se neutralice y nos mire a todos como personas iguales.