Existen muchos mitos y miedos alrededor del retinol. Algunos de ellos son que deja la piel sensible, que arde y que quema. Mientras que algunos de los beneficios son que mejora la textura de la piel desvaneciendo arruguitas, manchas y que unifica el tono de la piel. Augustinus Bader nos invitó a probar su The Retinol Serum para que nosotros mismos descubriéramos qué es verdad y qué es mentira.
Lo probamos editores de diferentes edades y tipos de piel y esta es nuestra experiencia.
Jordi Linares Rivas
31 años
Editor Digital
Deben saber que yo soy un entusiasta del retinol. Sufrí acné desde los 15 años y desde entonces he probado los activos más fuertes (siempre con acompañamiento dermatológico). Con el retinol, también he probado aquellos que casi casi te advierten “usar bajo tu propio riesgo” y me encantan sus efectos pero sé bien que no es para todos, las pieles sensibles pueden resentirlo. También me sucedió que decidí incluirlo en mi rutina hasta que cumplí los 30+, porque me parecía que no era necesario usarlo en pieles jóvenes. Dicho todo lo anterior, quiero contarles mi experiencia con Augustinus Bader.
Primero lo primero, y es que la textura de este sérum es suave y ligera sobre la piel. El retinol que usé antes tenía una consistencia de pomada y no era el más cómodo de aplicar. Lo siguiente es que también se trata de un retinol de alta calidad que a su vez es gentil con la piel. No es abrasivo ni demasiado fuerte. Empecé a utilizarlo por las noches durante un mes y noté que mi producción de grasa facial se equilibró. No quiero decir que desapareció, pero ustedes saben los calores que hemos vivido este 2024 y está realmente controlada. Mi piel tiene un glow natural que no se confunde con brillo indeseado. Y además, ¿les puedo confesar algo? Cuando salgo de viaje, es lo único que llevo para mi rutina de noche, pues también tiene una acción hidratante. Me parece uno de los mejores productos para entrarle al retinol y si ya eres fan, para usarlo todos los días.
Carolina Álvarez
43 años
Editora de belleza
Yo tenía sentimientos encontrados con el retinol. Con este trabajo tengo acceso a mucha información y muchos productos. Siempre que escribo sobre retinol, me impactan todos los beneficios para la apariencia de la piel, y una de mis makeup artists favoritas siempre me dice ‘’¡Usalo, es lo que te cambia la cara!". Y no es que no quisiera, pero antes de saber sobre el poder del retinol y su modo de uso, me unte uno que era puro y súper fuerte, y me quemó la cara y el cuello, obvio no quería usarlo nunca más. Después usé otro como debe der ser: Espaciando los días de aplicación, con el método del sandwich…y no me quemó la piel, pero si me la descarapeló y me la dejó hipersensible, entonces dije "¡No mas!", definitivo no es para mi.
Mis primeras impresiones de The Retinol Serum fueron: "¡Wow!", que bonito packaging, lista de ingredientes completa y me emocionó que está enriquecido con su famoso compuesto TFC8, una mezcla de vitaminas, péptidos y aminoácidos que protegen y nutren la piel. Empecé usando con mucha precaución (la verdad si me daba miedo), la textura es ligerita, como la de un hidratante muy líquido. Lo único que sentí la primera vez que me lo puse, fue un ligerísima picazón en el área de las mejillas, pero nada más, mi piel al otro día se veía FA BU LO SA. Después de usarlo de madera espaciada, la verdad me dejé ir y ahora hasta lo combino con ácido láctico (un día sí y un día no, no juntos) y mi piel si cambió, hasta podía ver en una nube a la makeup artist diciendo “¡Te lo dije!”; en general se ve más luminosa, mi tono más emparejado y sobre todo y lo que más me encantó es que los poros a los costados de la nariz disminuyeron en apariencia, le doy un 10 de 10 y definitivamente recomiendo hacer ese gasto, no se van a arrepentir.
Tamara Santillán Gutiérrez
31 años
Coeditora digital
Cuando el retinol de Augustinus Bader llegó a mi vida, estaba a 10 días de casarme y siendo súper sincera, no me atreví a probarlo en ese momento porque tenía miedo de que mi piel se irritara o me causara alguna reacción que afectara mi apariencia ese día. Para que tengan más contexto, amigas cercanas a mi me han platicado sus experiencias con el retinol y no son del todo buenas (a una de ellas se le quemó la piel). Tomé la decisión de empezar a probarlo al día siguiente de mi boda y para mi sorpresa, ahora no puedo dormir sin aplicármelo antes.
Al ser una persona que mantiene su skincare al mínimo y solamente usa lo indispensable, el retinol de Augustinus Bader me parece un GRAN producto pues en mi caso, cumple dos funciones. Además de todos sus beneficios, que incluyen el anti-envejecimiento, la renovación celular, reducir el acné y mejorar la textura y el tono de la piel, este activo de alta calidad también mantiene hidratada mi piel, tanto, que he dejado de aplicarme crema humectante en las noches. El cambio más notorio en mi carita hasta el momento es que ahora mi piel está muchos más uniforme y que los puntos negros en la zona T han disminuido significativamente. ¿Mi conclusión? ¡Debí empezar a usarlo antes de mi boda!
