Esta mañana de frío extremo nos dejó pensando en los beneficios que las temperaturas bajas tienen en el cuerpo. Específicamente en la piel. Ya que muchas veces hemos escuchado el término ‘crioterapia’ o ‘cryotheraphy’ en inglés, pero pocas veces hemos hablado de qué resultados tiene y de cómo podemos simular sus efectos en casa.
Ahora sí, hablemos de los beneficios:
El frío estimula la circulación y la oxigenación de la piel, disminuye la inflamación y energiza la piel. Esto resulta en una complexión luminosa , restaurada y rejuvenecida. Lo mejor de todo, es que generalmente los faciales que incluyen crioterapia integran otros métodos y activos para que los resultados sean drásticos y duraderos.
Crioterapia en casa…
Aunque no lo creas, hay varias formas en las que puedes adaptar los beneficios de la crioterapia desde la comodidad de tu casa. A continuación, te dejamos nuestras tres favoritas. OJO: Si en algún momento sientes que te estás quemando o irritando, pausa el tratamiento.
Hielo:
Así de sencillo. Envuelve un hielo en una gasa limpia y aplícalo con movimientos circulares sobre la piel. Notarás que te ayudará a desinflamar la complexión (incluyendo las imperfecciones). Si buscas algo más intenso, que también te despierte, llena un bowl con agua fría y hielos, cuenta hasta tres y sumerge la cara varias veces. Si este truco te suena, es porque es el ritual de todas las mañanas de Kate Moss.
Foreo UFO 2:
El nuevo UFO de FOREO tiene un ajuste de crioterapia ideal para cuando quieres algo rápido y efectivo. Lo puedes aplicar con una mascarilla o sobre tu suero favorito y mezclarlo con diferentes luces LED para conseguir una piel luminosa, tensa y energizada.
3. Las nuevas mascarillas de Dr. Jart+:
Las mascarillas de Cryo Rubber son como un facial en casa, ya que su tiempo de aplicación dura entre 30 y 40 minutos. Al actuar durante tanto tiempo tiene la capacidad de estimular la circulación sanguínea, refrescar la complexión y reducir el enrojecimiento.