Si hay algo que no puede faltar en tu rutina, es el suero (¡y el FPS!). Idealmente debes de tener varios a la mano para darle a tu piel exactamente lo que necesita. ¿Cómo sabes qué es lo que necesita? Fácil, después de lavarte la cara, obsérvala con detenimiento. Reconoce cuál es el problema que tienes y checa a continuación el suero que lo va a resolver.
Piel apagada – Vitamina C
Es como darle un boost de iluminación en cuestión de segundos. Lo puedes usar en las mañanas y en las noches, solo asegúrate de no usarlo al mismo tiempo que tu exfoliante químico. Te explicamos los ABC’s de este ingrediente aquí.

Acné – Ácido Salicílico
Imagínatelo como la solución a todos tus problemas. Puedes aplicarlo sobre toda la piel como exfoliante químico o simplemente sobre las imperfecciones. Para evitar reacciones adversas, empieza disolviendo un poco la fórmula con tu crema hidratante. OJO: Ten cuidado con el sol, ya que este ingrediente sensibiliza la piel.

Manchas – Niacinamida y/o Centella Asiática
También funciona para el acné, las rojeces y la rosácea. En pocas palabras: es multipropósitos. Puedes mezclarlo día y noche con la centella asiática (también conocida como Tiger Grass) para que tu rutina sea 100% anti manchas e imperfecciones. En este caso, más es más.

Piel deshidratada – Ácido Hialurónico
Día y noche, este activo es de lo mejor que hay. Ayuda a hidratar la piel con profundidad, rellena las líneas finas y da un efecto súper plumpy. OJO: Se tiene que aplicar sobre piel húmeda a fuerzas. Sino en vez de hidratar, va a deshidratar.

Líneas finas y arrugas – Resveratrol
Este poderoso antioxidante es tan increíble que no solo funciona como ingrediente anti-aging, también ayuda a calmar imperfecciones, rojeces y darle luminosidad a tu complexión. Al igual que protege de agentes externos cómo la radiación, el estrés y los rayos UV.

Piel seca – Un aceite*
La piel seca, a diferencia de la deshidratada, necesita una capa protectora. Para eso, los aceites son una maravilla. Aunque no son técnicamente sueros, también pueden contener activos como la vitamina C.
